El legendario nadador estadounidense Michael Phelps, conocido por su asombroso récord de 23 medallas olímpicas, ha dejado claro que aún cree tener lo necesario para competir al más alto nivel. A pesar de haber anunciado su retiro de las competiciones internacionales, el estadounidense sigue siendo una figura influyente en el mundo de la natación. En una reciente entrevista, Phelps discutió su posible regreso a los Juegos Olímpicos, comentando que, si bien su tiempo de competencia ya ha pasado, aún tiene la capacidad de ganar oro olímpico en pruebas como los 200 metros mariposa, pero que requeriría de un tiempo significativo de preparación.
Aunque ha pasado tiempo desde que Phelps brilló en la piscina, sus comentarios sobre la posibilidad de ganar nuevamente una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París o Los Ángeles muestran la confianza que aún tiene en sus habilidades. Phelps, quien dominó las pruebas de estilo libre, mariposa y combinado durante más de una década, comentó que si tuviera que prepararse para una prueba como los 200 metros mariposa, necesitaría al menos cuatro años de arduo entrenamiento para llegar a su nivel anterior.

¿Un regreso a los Juegos Olímpicos?

Cuando se le preguntó si podría volver a competir en los Juegos Olímpicos, Phelps fue claro. “Creo que podría ganar otra medalla de oro en los 200 metros mariposa, pero solo si tuviera cuatro años para prepararme a fondo”, declaró. A pesar de su retiro oficial después de los Juegos Olímpicos de Río 2016, Phelps no descarta la posibilidad de regresar al agua en un futuro cercano si las circunstancias fueran las adecuadas. Sin embargo, reconoció que la preparación para un regreso olímpico sería exhaustiva, pues su cuerpo ya no tiene la misma resistencia que cuando era más joven.
Phelps subrayó que, en su mejor momento, ocho años atrás, era más rápido que muchos nadadores actuales. Para él, la natación sigue siendo un deporte en el que se puede superar los límites con dedicación y constancia. A pesar de los años de descanso, Phelps mantiene la misma mentalidad ganadora que lo llevó a ser el atleta más condecorado de la historia de los Juegos Olímpicos.

La natación como refugio personal

Aunque la idea de un regreso al alto rendimiento parece remota, Phelps sigue nadando, aunque no con la misma intensidad competitiva. En su entrevista, mencionó que la natación sigue siendo una actividad que disfruta de manera personal. "La única vez que nado ahora es cuando mi cabeza no está en su mejor estado. El agua es el único lugar donde puedo estar sin pensar en nada más", confesó el nadador de 39 años.
Phelps ha hablado abiertamente en el pasado sobre sus problemas de salud mental, y el agua sigue siendo un refugio para él, un espacio en el que puede relajarse y desconectarse del estrés diario. Esta relación con el agua también refleja cómo ha cambiado su enfoque hacia el deporte, pasando de la presión constante de la competencia a una práctica más introspectiva y terapéutica.

Un legado que perdura

El legado de Michael Phelps sigue siendo un referente en el mundo de la natación y el deporte en general. Con sus 23 medallas olímpicas, sigue siendo el atleta más exitoso en la historia de los Juegos Olímpicos. Aunque su carrera competitiva ha llegado a su fin, su influencia en el deporte es incuestionable.
El hecho de que, aún después de retirarse, Phelps hable con tanta confianza sobre la posibilidad de ganar oro olímpico subraya la grandeza de su legado y la impresionante capacidad que todavía tiene para inspirar a nuevas generaciones de nadadores. Mientras tanto, el exatleta sigue siendo un modelo a seguir para muchos, especialmente por su disciplina y enfoque hacia el bienestar mental y físico.